¿Quieres conservar una piel bonita? Hay, al menos, siete errores de belleza que no debemos cometer si queremos conseguirlo.
Normalmente, cada nuevo año nos proponemos nuevos retos y nuevas metas para alcanzar. ¿Y si este año uno de esos propósitos es aprender a cuidar mejor de nuestra piel?
Muchas veces, a causa de la falta de tiempo, falta de ganas o incluso falta de conocimientos, cometemos pequeños errores que pueden tener un verdadero impacto negativo en nuestra piel. Pero no os preocupéis, porque aquí estamos para ayudaros en esa importante tarea de conservar y reencontrar una piel radiante y bonita. Únicamente, pequeños gestos muy sencillos y fáciles de seguir que mantendrán vuestra piel en plena forma, joven y luminosa durante mucho más tiempo.
Vamos allá con los errores más comunes:
1- Confundir tu tipo de piel
El primer paso indispensable antes de comenzar cualquier tipo de cuidado es saber qué tipo de piel tienes ya que cada uno de ellos necesita unos cuidados diferentes y específicos. Diferentes ingredientes con diferentes propiedades que actuarán de manera particular en las necesidades de cada piel. En Sent Natural disponemos de diferentes tipos de cremas faciales que se adaptarán a tu tipo de piel y los cuidados que necesita.
2- Saltarse el proceso de desmaquillar
Dentro de los errores de belleza que acostumbramos a cometer sin darnos cuenta, éste es uno de los más graves y el que debemos corregir más rápidamente. Es cuestión de vida o muerte! Sí, lo decimos en serio ! Para vuestras pobres pequeñas células que esperan el momento y se esfuerzan cada noche en renovarse y regenerarse, el hecho de dejar una capa de maquillaje hace que los poros se obstruyan y que provocan la asfixia de vuestra piel. Consecuencias? La regeneración celular se ralentiza por no decir que desaparece y , por lo tanto, se acelera el envejecimiento cutáneo, la deshidratación, los poros obstruidos que nos llevan a una tez apagada y sin vida.
Venga! No seas remolona y tómate 5 minutitos para desmaquillar tu piel cada día antes de ir a dormir y ya verás cómo tu piel, cuando respire, te hará el mayor regalo de belleza.
3- Limpiar la piel de manera agresiva
Estamos de acuerdo que hay que limpiar la piel, pero por otro lado no hay que cometer el error de hacerlo de manera demasiado agresiva. Exfoliar la piel demasiado a menudo puede alterar la producción de sebo por parte de las glándulas sebáceas y puede provocar también la fragilidad de la piel. Desmaquilla, limpia y después hidrata o nutre. Combina aguas miscerales, hidrolatos florales o geles limpiadores en tu cuidad diario y tu piel se mantendrá limpia sin agredirla.
4- No proteger la piel de los rayos del sol
Aunque parece un consejo muy evidente, no siempre lo llevamos a cabo y olvidamos que los rayos UV impactan a lo largo de todo el año en la salud de nuestra piel y aceleran el envejecimiento cutáneo.
Acostúmbrate a llevar siempre en tu bolso un pequeño tubo de protección solar para usarlo cuando sea necesario.
5- Olvidarse de hidratar la piel lo suficiente
Ah, la hidratación! Siempre hablando de la hidratación! ¿Será porque es la base indiscutible de una piel el perfecto estado de salud? Pues bien, efectivamente, lo es.
Una piel bien hidratada es una piel donde la capa hidrolípida se transforma en una barrera protectora de los agentes externos. Además, la hidratación le aporta a la piel un mejor aspecto. Más flexible, más rellena, más uniforme y, sobretodo, más luminosa.
No olvides hidratarte también desde fuera bebiendo, al menos, un litro y medio de agua al día y para tu cuidado de la piel, elige aquella crema hidratante o nutritiva que mejor se adapte a tu tipo de piel y que le aporte el nivel de hidratación que realmente necesita.
6- Tocarse la cara continuamente
Allí donde estemos, el deseo irrefrenable de tocarnos la cara continuamente, de frotarnos los ojos o de reventarnos o estrujar algún grano es indiscutible. Y, sin embargo, nunca nos paramos a pensar que en nuestras manos se concentran cientos de bacterias y de gérmenes que trasladamos a nuestra cara en cuanto ponemos nuestras manos encima y que pueden repercutir negativamente en la salud de nuestra piel.
Así que ya sabes, guarda las manos en tus bolsillos o, al menos, bien lejos de tu cara y deja que tu piel viva su vida tranquilamente.
7- No cuidar tus hábitos alimenticios
Seguro que más de una vez has oído la famosa frase: eres lo que comes. Pero no por oírla muchas veces deja de ser menos cierta.
Lo cierto es que una dieta sana y equilibrada le aportará a tu piel toda una serie de nutrientes que la mantendrán en un bien estado de salud durante mucho más tiempo. Una buena alimentación rica en vitaminas, minerales y ácidos grasos esenciales harán que tu piel se mantenga más joven, más suave y más radiante y luminosa.
Entonces, ¿estás dispuesta a corregir todos estos errores de belleza en tu rutina cotidiana? Para mejores resultados, sería importante también que consultaras nuestros consejos sobre cómo recuperar la piel después de las fiestas en este mismo blog.
No lo dudes ni un momento y tu piel, rápidamente, te lo agradecerá!